Rodrigo Ávila acepta la derrota

FMLN 51'28% VOTOS VALIDOS 1.250.521    ARENA 48'72% VOTOS VALIDOS 1.188.168

El candidato presidencial de Arena prometió una oposición constructiva, hizo un llamado a la unidad a su partido y dijo pedirle a Dios que dé sabiduría a Mauricio Funes y al FMLN para conducir el país.

Redacción de El Faro / Fotos de Mauro Arias. EL FARO

Casi cuatro horas después de que el FMLN se autoproclamó ganador, el presidente del partido Arena y candidato presidencial, Rodrigo Ávila, dirigió un discurso ante cientos de sus seguidores congregados en las afueras del cuartel central del partido en San Salvador, para reconocer el triunfo de su adversario, Mauricio Funes.

Escoltado por unos cariacontecidos candidato a la vicepresidencia, Arturo Zablah, y presidente de la República, Antonio Saca, Ávila inició su alocución a las 10:45 de la noche.

Faltando un minuto para las 11 de la noche, Ávila pronunció el nombre de su contrincante, quien se había declarado ganador dos horas antes. “A Mauricio Funes y al FMLN, reconocerles que en esta lucha cerrada, el margen de diferencia les ha dado la ventaja”, dijo.

El ex director de la Policía repasó los meses duros de trabajo que supuso la campaña electoral y agradeció a su partido y a la militancia el esfuerzo que hicieron. “Estos son los vaivenes de la democracia”, comentó Ávila, quien a lo largo de su discurso fue soltando una que otra sonrisa. Algunos de los presentes, como los ex presidentes de la República por Arena y la vicepresidenta, Ana Vilma de Escobar, parecían menos perturbados y sonreían con frecuencia, y era evidente que muchos trataban de hacer una fiesta de esa reunión. Entre esos muchos quien destacaba por su cara de pesar y quien nunca reía era Arturo Zablah, quien se convirtió en candidato a la vicepresidencia en octubre de 2008, un año después de haber pedido a la sociedad que hiciera lo posible por unificarse para sacar a Arena del gobierno.

Fue hasta las 11:02 de la noche, después de 17 minutos de discurso, cuando Zablah finalmente rio. “Quiero reconocer a mi compañero de fórmula, Arturo Zablah, porque se ha fajado”, dijo Ávila, quien se volvió hacia su izquierda para abrazar al empresario. Este fue el único momento en que la cara larga de Zablah se transformó.

Ya casi para terminar sus palabras, Ávila cayó en un desliz cuando intentaba cerrar su participación: "El legado de Arena es... imperdurable".

Ávila ahora deberá conducir un partido en el que algunos nombres históricos pretenden que se reforme prácticamente de inmediato. Así lo han planteado en las semanas anteriores hombres como Armando Calderón Sol y Hugo Barrera, quienes manifestaron que una vez pasada la elección de este domingo el partido debe reestructurarse y la actual dirección debe ceder el control.

Fue el mismo Calderón Sol quien dijo a El Faro que el triunfo del FMLN, que acabó con 20 años de gobiernos areneros, era un triunfo de la democracia. Unas horas antes, el presidente del Tribunal Supremo Electoral, Walter Araujo, también sentenció que la llegada de la alternancia era un gran paso para este país centroamericano. “La democracia ya se quedó definitivamente en El Salvador. El Salvador ha ganado”, dijo.